El pasado lunes, día 27, Lorenzo Amor, presidente de la Federación de Trabajadores Autónomos hizo unas declaraciones a TeleMadrid en las que se mostraba absolutamente pesimista sobre los trabajadores autónomos en la actual situación de crisis económica.

Según Lorenzo Amor, nuestro país contaba con 3.300.000 trabajadores autónomos a fecha del pasado 30 de septiembre. “En veinte años, desde que se creó el régimen especial hasta 1983, con la reconversión industrial, se perdieron 40.000 autónomos. Con la crisis de 1993 fueron 27.000… Pues bien, en tan sólo los nueve primeros meses de 2008, 40.000 autónomos están en el paro. Si se sigue con la dinámica actual —continuó Lorenzo Amor—, terminaremos el año con 80.000 autónomos menos y si se sigue sin poner remedio, en el 2009, la cifra podría alcanzar los 100.000, y cuando se pierde un autónomo no sólo desaparece un puesto de trabajo sino un potencial generador de empleo y de riqueza”.

Para Lorenzo Amor “el autoempleo está dejando de ser una alternativa para el trabajador en paro”, ya que “el número de altas que se ha producido en 2008 ha sido inferior al de 2007. Es decir, poner un negocio, ya no es una alternativa para el desempleado ni una salida para reincorporarse al mercado de laboral”.

Uno de los problemas más acuciantes para los autónomos es, según Lorenzo Amor la falta de financiación. “Las entidades financieras —concretó ante las cámaras de TeleMadrid— no financian las iniciativas empresariales. Al autónomo se le niegan las pólizas de crédito y las renovaciones de los créditos, o bien no se le vuelven a dar o, si se le dan, se reducen al 50 o al 30%”, advirtiendo que los 150.000 millones de euros que el Estado ha dado a los bancos para evitar las restricciones crediticias “no van a llegar ni a las empresas ni a las familias”.

“No es lógico —remarcó Lorenzo Amor— que España tenga un impuesto de sociedades y una presión tributaria que dobla la de casi todos los países de la Unión Europea. Si necesitamos hacer un país atractivo a los inversores para que traigan dinero y generen empleo, jamás lo vamos a conseguir con una inflación un punto superior al resto de la Unión Europea, con una tasa de productividad muy por debajo y una carga tributaria muy por encima de la media europea. Pero, desde marzo, parecemos que estamos quietos, esperando a que caiga el chaparrón”.

Por último, Lorenzo Amor instó a que se desarrolle reglamentariamente el Estatuto del Trabajador Autónomo, sobre todo en casos como el de la prestación por desempleo, por desarrollo legal.