Los medios llevan ya seis años observando cómo se reduce su facturación publicitaria, que se ha desplomado de media un 60% en los últimos cuatro años. En septiembre del pasado año la caída estuvo cerca del 4%, llegando incluso algunos periódicos a registrar solo un 2%. Este fue un dato muy positivo con respecto al pasado verano cuyo retroceso fue del 19 por 100, llegando incluso al 30 por 100 de caídas algunas cabeceras españolas.

La inversión publicitaria en España, que supone un 1,1% del PIB, ha retrocedido a niveles de 2003, según InfoAdex y los ingresos de hoy son una cuarta parte de los ingresos de 2007 y los costes no se han reducido ni a la mitad, a pesar de los ajustes que han realizado todos los diarios.
Según publica Prnoticias “parece que se despejan las incertidumbres, y salvo catástrofe, los primeros meses de 2014 podrían ser positivos para el sector. Las perspectivas son detener las caídas y tener un crecimiento plano”.Al parecer, la causa principal de esta recuperación es que los anunciantes han comenzado a recuperar, o al menos a dejar de reducir, sus presupuestos. De esta manera muchas de las grandes empresas parecen volver a confiar en el poder de la prensa, algo que va unido a una esperanzadora recuperación del consumo.
La publicidad en la prensa, por su diversidad de formatos y precios resulta muy adecuada para cualquier anunciante. Sus posibilidades son inmensas y permite una excelente segmentación geográfica.





