El presidente nacional de ATA (Federación Nacional de Trabajadores Autónomos) Lorenzo Amor, en declaraciones recogidas por La Tribuna Digital de Ciudad Real, y publicadas el pasado 6 de abril, expresaba rotundo que habría que poner en marcha reformas fiscales y establecer estímulos a la contratación y ponía como ejemplo de la situación actual por la que pasa el colectivo de los autónomos precisamente al colectivo de los quiosqueros. Según Lorenzo Amor, “no puede ser que un señor con un quiosco de prensa y una caída de la actividad del 40 por ciento pague ahora lo mismo que pagaba en 2007.”
El presidente de ATA afirmó que el Gobierno central debe solventar los principales problemas que el colectivo de los trabajadores autónomos está padeciendo por la crisis económica, un colectivo que “está en estos momentos olvidado y muy tocado”.
Abogó también por buscar soluciones y “una salida a la crisis para que los autónomos vuelvan a ser el motor de la economía”, ya que actualmente una de cada cuatro microempresas ha tenido que cerrar sus puertas.
ATA defiende que actualmente y para ayudar a los trabajadores autónomos, el Gobierno debería actuar en tres frentes, las ayudas crediticias, la reforma laboral y la presión fiscal. Las líneas de crédito oficial (ICO) están salvando sólo a uno de cada tres pymes o autónomos. Habría que clarificar las causas de despido objetivo o económico para evitar el miedo a contratar personal. Y por último la anunciada subida del IVA del 16 al 18% es actualmente inoportuna puesto que lo que ahora tocaría es bajar los impuestos para fomentar el consumo. La rebaja de un punto de las cotizaciones sociales es claramente insuficiente, puesto que para el 80% de las empresas supone sólo un ahorro de 100 euros al año.
Para Lorenzo Amor es imprescindible la puesta en marcha inmediata de un Plan de Rescate del Comercio, que evite la destrucción de comercios, de empleo y que, en definitivña, erradique la imagen desoladora de los comercios con carteles de venta, alquiler o traspaso.





